El uso de cinturones de seguridad, cascos y
sistemas de retención infantil han salvado miles de vidas. Los choques
automovilísticos son la causa principal de muerte de niños entre los 3 – 6 años
y los 8 – 14 años, el 95% de los muertos y heridos ocurren en países de
ingresos bajos y medios.
Los sistemas de retención infantil reducen
las hospitalizaciones en un 69% en el grupo etario entre 1 y 4 años, han
demostrado una reducción de riesgo de muerte en los bebés en un 70% y en los
pacientes de 1 – 4 años de un 47-54%.
Las funciones del cinturón de seguridad son
entre otras:
- Reducen el riesgo de contacto con el interior del vehículo.
- Distribuyen las fuerzas del choque sobres las partes mas fuertes del cuerpo humano.
- Impiden la expulsión del ocupante.
- Impiden que se lesionen otros ocupantes.
Los tipos de cinturón de seguridad son:
Cinturón abdominal y diagonal de 3 puntos, cinturón abdominal de 2 puntos,
cinturón diagonal, arnés completo.
- Usar asientos de segunda mano, pueden estar desactualizados, tener grietas, estar incompletos o presentar algún otro problema.
- Usar la silla para bebé después de la fecha de caducidad, ya que el plástico tal vez no pueda soportar la fuerza de un accidente.
- En el auto, llevar al bebé en los brazos porque “el niño llora” o “necesita ser alimentado”; lo mas seguro es detener el vehículo y atender el problema sin arriesgar la seguridad del niño.
- El asiento trasero es el sitio mas seguro para un niño de cualquier edad.
- Nunca coloque a un niño que va en una silla en sentido contrario a la marcha, en el asiento delantero.
- Al inflarse el “air-bag” puede aplastar al niño y provocarle la muerte.
- Utilice únicamente sillas y dispositivos de sujeción iguales y lea las instrucciones de uso.
- Una silla sin una adecuada sujeción al asiento del auto es tan peligrosa como llevar al niño suelto.
- No lleve objetos sueltos en la parte trasera del auto, pueden convertirse en “proyectiles” y lesionar a los ocupantes.
Esperamos que estas sencillas recomendaciones
las pongamos en práctica y de esta forma reducir el riesgo de una lesión mayor
en caso de ocurrir un accidente automovilístico.
Dra.
Huníades Urbina, PhD